YPF y la empresa malaya Petronas firmaron ayer un acuerdo para explorar en conjunto un área del yacimiento no convencional de Vaca Muerta. El convenio supone un desembolso de U$S 550 millones para el comienzo de las pruebas piloto, que se harán a principios de 2015. Del total, la empresa nacional desembolsará U$S 75 millones y la asiática los U$S 475 millones restantes. Luego, en los cinco años siguientes, se especula con una inversión superior a los U$S mil millones. El bloque a explorar en shale es La Amarga Chica, en Neuquén, una zona de 187 kilómetros cuadrados en la que se perforarán 30 pozos.
En paralelo, el convenio volvió a acercar al titular de YPF, Miguel Galuccio, con el gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, empezando a desenredar la madeja de la Ley de Hidrocarburos, texto clave para atraer inversiones externas y que terminará de delinearse la semana próxima (ver aparte). Además, una mejor relación con Neuquén es importante incluso para el contrato con Petronas: el texto exige que YPF sea el dueño del 100% del área para luego dividir en partes iguales la zona. Hoy, YPF tiene el 90% y el 10% restante es de Gas y Petróleo del Neuquén (GyP), la estatal de energía de la provincia. YPF ya negocia comprar esa parte con dinero de su propio flujo de caja.
Tras ponerle la firma junto con el CEO de Petronas, Tan Sri Dato'Shamsul Azhar Abbas, Galuccio hizo declaraciones desde Kuala Lumpur, la capital de Malasia. "Este proyecto arranca a principios de 2015 y tendrá un ingreso de dinero a lo largo de tres años", dijo el presidente y aseguró que hay interés de los malayos en trabajar en petróleo off shore, donde tienen amplia experiencia: "No es prematuro pensar en comenzar la exploración en off shore, lo tenemos que poner en agenda rápidamente. Puede ser un complemento Petronas para el off shore, están interesados y podemos pensar en hacer otras cosas en algún otro lugar de Latinoamérica", aseveró Galuccio. De hecho, hubo ayer una señal política de continuidad y de un vínculo más amplio entre las empresas: en la previa de la comunicación oficial, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, mantuvo un diálogo telefónico con el primer ministro de Malasia, Najib Tun Razak, en la cual intercambiaron información sobre los alcances de este nuevo proyecto y se comprometieron a seguir trabajando.